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Propósitos del programa

1. ¿Qué son las Relaciones Internacionales?

Las relaciones entre grupos políticamente organizados nacieron como un medio de aproximación entre los pueblos desde la antigüedad y se han desarrollado a lo largo de la historia hasta evolucionar en la disciplina independiente que hoy denominamos como relaciones internacionales. Las Relaciones Internacionales desde su concepción clásica, surgieron a partir de la configuración del sistema de naciones, heredado de la Paz de Westfalia de 1648, y se han caracterizado por su permeabilidad con otras ciencias sociales como la Filosofía, el Derecho, la Historia, hasta la incorporación de la Ciencia Política, la Sociología y la Economía. Hacia esa etapa, los estudios se concentraban en analizar los vínculos y relaciones desde la centralidad del Estado-nación, como sujeto exclusivo de la actividad internacional y a través de su representatividad política.

La disciplina de Relaciones Internacionales está inspirada en el Congreso de Viena de 1815 por las aportaciones metódicas y técnicas utilizadas por Castlereagh y Talleyrand en la redacción de los acuerdos alcanzado y se instituyó como tal después de la Primera Guerra Mundial, con la creación del primer Departamento de Política Internacional en la Universidad Aberystwyth en Gales. Ahí se estableció la primera cátedra en Relaciones Internacionales, la Cátedra Woodrow Wilson, cuyo objetivo era estudiar la interacción entre naciones y personas para alcanzar la paz mundial y dirimir la amenaza de la guerra. Este objetivo reflejó el idealismo político de la época, tomando su nombre del presidente de Estados Unidos, precursor del espíritu pacifista del momento.

Con el tiempo, la Cátedra y sus objetivos evolucionaron, en particular cuando estuvo a cargo Edward Hallett Carr, crítico de la Liga de Naciones, al considerarla anacrónica e incapaz de obligar a las naciones a evitar la guerra para consolidar la paz mundial. Las controvertidas opiniones de Carr se convirtieron en una pieza fundamental de las Relaciones Internacionales, ya que contribuyeron a definir el campo de estudio de la disciplina a partir del Realismo Político.

Al tiempo en que se fundó la cátedra Wilson, otras universidades hicieron lo propio, empezaron a incluir el estudio de los asuntos internacionales en su curriculum, cada una con su propia visión y enfoque. Unas se concentraron en el estudio de las organizaciones internacionales y las acciones de los Estados, partiendo de una visión humanista; otras se enfocaron en la formación de personal diplomático y otras adoptaron una base estrictamente teórica para explicar las Relaciones Internacionales.

Con el fin de la Segunda Guerra Mundial, el estudio de las Relaciones Internacionales se volvió mucho más amplio. Aparecieron nuevas corrientes teóricas que buscaron explicar el impacto de diversos acontecimientos como la guerra y su prevención, el establecimiento de la paz, la armonía internacional y los sucesos internacionales en general. Asimismo, surgieron nuevos actores en la dinámica internacional, como la Organización de Naciones Unidas y sus órganos filiales y algunos sui generis que han marcado la pauta en el orden contemporáneo.

Así, la disciplina de Relaciones Internacionales evolucionó hasta convertirse en transdisciplinaria y multidimensional, lo que permite en su práctica y estudio, analizar, interpretar el fenómeno internacional y proponer hechos y acciones de gran complejidad para dar respuesta a los retos de nuestro tiempo desde diferentes perspectivas, pero siempre manteniendo a la persona en el centro de todo estudio.

La disciplina de Relaciones Internacionales permite, a quienes se dedican a ella, desarrollarse en una amplia gama de temas conexos a la realidad mundial y además, hacerlo desde diferentes perspectivas. En un mundo cada vez más interconectado e interdependiente, donde han sido superadas las barreras del tiempo y el espacio, sucesos en lugares específicos repercuten directa o indirectamente a nivel global; por tanto, en la actualidad se vuelve cada vez más necesario entender, analizar, explicar e interpretar objetivamente otras realidades, para poder comprender la propia.

Es evidente que los variados elementos que conforman a las Relaciones Internacionales contribuyen a la formulación de debates académicos y públicos, a la profundidad en el análisis como eje distintivo de su riqueza interdisciplinaria que, en suma, generan el surgimiento de ideas y propuestas de alto rigor intelectual, aportando soluciones a los actuales dilemas, derivados de la construcción social como factor de origen del sistema internacional en sus múltiples facetas y escenarios, para contribuir en la resolución de los grandes desafíos a los que continuamente se enfrenta la sociedad global.

En México, la disciplina de Relaciones Internacionales es relativamente reciente, tiene su antecedente en la licenciatura de Ciencias Diplomáticas en 1957 y una década más tarde, tomaría su nombre actual. De ella emanaron otros programas académicos como Comercio y Negocios Internacionales.

2. ¿Para qué enseñamos Relaciones Internacionales?

En un mundo en el que la inmediatez de la información y la ubicuidad nos hace estar cada vez más interrelacionados, donde las fronteras se diluyen y se rebasa la centralidad del Estado en favor del empoderamiento del individuo, es imprescindible que el internacionalista entienda que el reconocimiento de la libertad del ser humano es un compromiso y una responsabilidad, pues la comunidad gira en torno a la persona humana.

Las Relaciones Internacionales son una disciplina que busca comprender y explicar las relaciones entre sociedades organizadas representadas por medio de Estados y otros actores en el sistema internacional, en foros multilaterales, organismos internacionales, empresas multinacionales, de manera individual o colectiva, en la atención de intereses públicos y privados.

En las Relaciones Internacionales el individuo es origen y destino. El fin de la disciplina es facilitar la comprensión de uno mismo y del otro, así como de su entorno; de que el ser humano es parte de una comunidad global, sin dejar de pertenecer a su medio inmediato; y de que su razón de ser y de actuar, repercute en su presente y futuro.

Así, la licenciatura en Relaciones Internacionales sirve a la persona en tanto que:

  1. a)  Le brinda herramientas epistemológicas, ontológicas y metodológicas para entender la intersubjetividad de la persona y su realidad en el contexto internacional.

  2. b)  Facilita e incentiva la comprensión y el entendimiento de los pueblos en el mundo, como artífice fundamental hacia la conformación más armoniosa de la comunidad de la humanidad.

  3. c)  Contribuye al desarrollo de los elementos que permiten la plenitud de la persona humana: búsqueda del bien común, de la paz, la cooperación y subsidiariedad, del desarrollo y prosperidad de las personas y la creación de una verdadera solidaridad para la convivencia armónica de la sociedad.

3. ¿Qué significa ser un Internacionalista Anáhuac?

En la Universidad Anáhuac, la enseñanza de las Relaciones Internacionales parte de una visión basada en los valores del humanismo cristiano, en la centralidad de la persona como parte de una comunidad.

El Internacionalista Anáhuac busca mejorar las condiciones del mundo actual y compaginar sus valores con los avances en la ciencia y la técnica, con el fin de que la persona pueda conocerse mejor y así servir mejor a la comunidad internacional.

Así, ser un Internacionalista Anáhuac significa:

  1. Ser una persona íntegra al servicio de los demás, capaz de trazar pautas hacia el

    desarrollo y progreso de su entorno, su país y del sistema internacional. Ser un

    buscador de la verdad y de la convivencia armónica de las pueblos del mundo.

  2. Colocar a la persona en el centro de todo, al adoptar una actitud de servicio para el bienestar de las personas y velar por el reconocimiento, la defensa y la protección de

    los derechos inherentes a la persona humana.

  3. Entender la intersubjetividad de la persona para facilitar la comprensión del otro, tanto

    en el ámbito local como en el global.

  4. Actuar de forma ética y con base en los valores del humanismo cristiano, en la defensa de la verdad y la justicia, y fomentar valores que contribuyan a la cooperación internacional y la solidaridad.

  5. Ser responsable en su actuación, cualquiera que sea su área de trabajo, para contribuir a la paz, fomentar la prosperidad y la solidaridad entre las personas e igualdad jurídica de los pueblos.

  6. Conocer a profundidad el devenir histórico y contexto presente, desde un punto de vista multidisciplinario, en el que la integración de saberes permita explicar, analizar, interpretar y proponer soluciones a partir del estudio continuo de la realidad internacional.

    y en la política exterior de México en particular.

    contemporáneo.

    y generador de propuestas y consensos en favor del bien común.

 

4. El compromiso del Internacionalista Anáhuac

El Licenciado en Relaciones Internacionales Anáhuac es una persona con sólida formación profesional, intelectual, humana, social y espiritual que busca, ante todo, la verdad y el bien, además de dedicarse a ejercer su liderazgo para la transformación de la sociedad y la cultura, partiendo de la búsqueda de la verdad e inspirándose en alcanzar el bien.

El Internacionalista Anáhuac estará formado para ser un líder de acción positiva con sólidas bases teóricas, económicas, geopolíticas, jurídicas, históricas, multiculturales, diplomáticas y de negociación; que mediante el absoluto compromiso con la verdad detectará, analizará y evaluará situaciones y necesidades del mundo contemporáneo, desde la centralidad de la persona humana. Asimismo, -mediante el diseño de estrategias, creación de proyectos, elaboración de propuestas y concertación de soluciones- transformará el escenario internacional desde los puestos clave que llegue a operar en los ámbitos público y privado con impacto en las esferas nacional e internacional.

 

Ser negociador y facilitador de soluciones en las relaciones internacionales en general,

 

Identificar, reconocer, respetar y proteger la diversidad cultural del mundo

 

Ser un líder de acción positiva, con vocación de servicio, preocupado por su entorno

  Estar a la vanguardia de su tiempo y hacer de este mundo, un mejor lugar para vivir

 

 

En resumen, el Internacionalista Anáhuac es un profesional con la capacidad de:

a)  Detectar y solucionar problemas
b)  Tomar decisiones efectivas
c)  Pensaranalíticaycríticamente
d)  Actuar éticamente
e)  Comunicarseatravésdediferentesmedioseidiomas
f)  Plantear estrategias y acciones para mejorar el entendimiento multicultural
g)  Organizarconeficienciarecursosenlaimplementacióndeproyectosinternacionales
h)  Conocer, explicar, proponer y generar canales de entendimiento y cooperación en temas internacionales
i)  Impulsar emprendimientos creativos e innovadores que se desarrollan en el ámbito internacional
j)  Adaptarse a contextos multiculturales
k)  Trabajar en escenarios multidisciplinarios
l)  Contribuir en mejorar el mundo a través del diálogo la negociación y el respeto entre las naciones

La sociedad requiere de personas íntegras y propositivas que, mediante la calidad y luminosidad de su pensamiento, así como la firmeza de sus valores, tomen decisiones que aseguren un mundo mejor; personas con capacidades, conocimientos, hábitos intelectuales y destrezas, con respeto y defensa de las virtudes humanas y sociales.

 

Descarga el Ideario del programa aquí