Influencers y percepción
El auge de los influencers
Innegablemente los tiempos han cambiado. Sin alguien nos hubiera dicho hace 20 años, incluso hace 10, que podríamos vivir y tener reconocimiento social (que a veces llega a pleitesía) por medio de subir contenido a redes sociales. Muchos de nosotros habríamos rechazado categóricamente la idea con alguna sonrisa socarrona. Más, cuando el primer video que se subió a YouTube fue en el lejano 2005, ¡sí querido lector, en el 2005!
Sin embargo, el desarrollo tecnológico y diversos factores sociales y de salud han hecho que hoy en día esta actividad no solo provea dinero, sino que en ocasiones genere cantidades exorbitantes. Aquellos quienes logran encontrar un público específico y transmitir lo que ese público busca/quiere/necesita puede llegar a construir un camino sólido en la carrera de la creación de contenido.
Hoy día tenemos una cantidad gigantesca de temas sobre los cuales se hace contenido y aún más el número de creadores que buscan constantemente llegar a la tan anhelada viralidad. Así como hay quienes persiguen el reconocimiento se encuentran aquellos a quienes les llega por un video grabado por un extraño, por casualidad y sin perseguirlo. Es muy curioso como este efecto se presenta en nuestros días. Sin duda en una forma global de exposición.
Con ello llegamos al punto de lo que pretendemos en este artículo que es hablar sobre esta percepción (sesgada) que generan aquellas personas que son consideradas influencers, no solo aquellos que llegaron a la viralidad por un solo video, sino de aquellos que dedican un tiempo considerable a estar vigentes y que cuentan con un público numeroso (millones a quienes se dirigen).
Los influencers, dialogan, enseñan o muestran algo sobre una parte de su vida. Esta línea puede pasar desapercibida, sin embargo, no es así. Cuando se muestra una sola cara de un cubo, se observa sólo un pequeño fragmento de la vida en toda su complejidad.
Principios de la Gestalt
Esto sin duda puede generar alteraciones en la percepción. La teoría de la Gestalt nos ofrece una perspectiva de como recibimos y organizamos la información por medio de principios como: figura-fondo, proximidad, similitud o cierre.
Esto que comento es a veces tan normal como lo siguiente: Le pido al lector que hagamos un ejercicio de reflexión y eso nos permita reconstruir o reafirmar algunas ideas. Cuando usted toma una foto para lo que usted guste (WhatsApp, Facebook, Instagram, TikTok o tenerla en el baúl) ¿qué foto elije? ¿Aquella donde entrecerró los ojos? ¿la que está movida? ¿o la que salió mejor a su gusto y donde se ve bien o guapa o guapo? Parece que la respuesta es sencilla. En su gran mayoría tenemos este deseo de mostrar la mejor versión posible de nosotros. En general buscamos publicar aspectos destacables y positivos de nuestra vida. Poco hablamos de los momentos difíciles, no subimos una foto a Instagram de cómo nos vemos el domingo por la mañana al despertar y la dejamos para que el mundo la vea.
Estas conductas, aunque nos suenen constantes y cotidianas a menudo provocan un efecto de bola de nieve. Cuando las colocamos en influencers, del que usted me diga, este efecto se potencializa a niveles astronómicos y ¿qué es lo que terminamos viendo? Una pequeña parte de una figura mucho más compleja.
Llamado a la reflexión
La cuestión que me parece de relevancia es que esta idea se permea en las generaciones. Desde baby boomers hasta la generación Alpha y corremos el riesgo de generar este sesgo en la información que recibimos de las redes. Creencias como que la vida debe siempre ser feliz sin espacios para momentos difíciles, puede generar expectativas irreales e instaurar presión.
Claro que las consecuencias de esta percepción sesgada pueden tener consecuencias de verdad severas. Expectativas elevadas y poco realistas, frustración, ansiedad o presión social por mencionar algunas.
Hoy quiero con esto invitar al lector a reflexionar de manera crítica el contenido que consume, las personas a las que sigue y de quien recibe la información. A realizar un análisis de como esto influye en su propia forma de vivir la vida y asumir el reto constante de cuestionar.
De todo corazón deseo al lector buena información, adecuados guías virtuales y sobre todo una consciencia plena sobre su salud mental.
Por el Mtro.Hernán Álcantara Martínez
Psicoterapeuta de la Clínica de Psicología de la Anáhuac Puebla