De forma significativa la pandemia por Covid-19 nos dejó un impacto positivo en la transformación digital, las empresas tuvieron que responder de forma casi inmediata para afrontar la nueva realidad, logrando que se dieran avances en dos o tres meses que habrían sido desarrollados hasta dentro de un par de años. Esta transformación no es cuestión temporal, llegó para quedarse.
La nube (o cloud), ha sido esencial en el proceso de transformación digital para que los usuarios puedan tener conectividad eficiente, así como acceder a determinada información en el momento y lugar necesarios.
Un ejemplo muy sencillo y claro de cómo funciona un servidor en la nube, son las redes sociales, proveedores de almacenamiento o de correo electrónico; que permiten por un lado que puedas iniciar sesión como usuario en cualquier dispositivo en donde te encuentres y a los colaboradores de la empresa, tener acceso a la información, archivos y aplicaciones que requieren para trabajar en cualquier parte del mundo, permitiendo el trabajo eficiente de forma remota y colaborativa.
Esta cantidad abrumadora de datos en la nube con información sensible, seguramente te ha dejado con la interrogante de la seguridad de los datos, los ciberataques o hackeos. ¿Cómo pueden hoy en día las empresas garantizar la seguridad de tanta información y no quedar expuestos?
Ahí es en donde entra en el panorama la tecnología Blockchain, que permite tener una base de datos descentralizada. ¿Blockchain? Seguramente has escuchado este término y no tiene ningún sentido para ti, más que la traducción literal de “cadena de bloques”. Y en efecto, la tecnología Blockchain está basada en una cadena (chain) o sucesión de bloques (block) de datos, que permite tener un registro confiable y seguro de transacciones.
Una red en donde todo el mundo es emisor y receptor; pueden integrarse para trabajar en cooperación y ofrecer confianza y escalabilidad a los usuarios.
Es decir, es como una base de datos en la que cada transacción hace referencia a la anterior y cada usuario tiene consigo las partes de la base de datos que corresponden a sus transacciones, que se distribuye de forma segura, rápida y que tiene los datos sellados criptográficamente. Evitando cualquier posible amenaza en el futuro.
A pesar de que la nube y Blockchain son de cierta forma contradictorios, la primera se basa en confiar en una entidad externa y la segunda en no confiar o depender de nadie, sino una red en donde todo el mundo es emisor y receptor; pueden integrarse para trabajar en cooperación y ofrecer confianza y escalabilidad a los usuarios.
Por si sola, la tecnología Blockchain tiene como principales beneficios la automatización, ahorro de costos, eliminación de intermediarios, control de la cadena de suministro y seguridad. En este sentido, la convierten en una pieza fundamental para la industria 4.0, de forma que pueda continuar avanzando de forma controlada, eficiente, flexible y segura.
Uno de los principales usos y de mayor utilidad en las empresas es en envíos y cadenas de suministros ya que cada paso es registrado y no se puede falsificar, por lo que brinda una mayor seguridad al proceso y si llegará a existir un problema, gracias a los bloques inalterables es más fácil identificar en donde se rompió la cadena y solucionarlo.
Entre las empresas a nivel internacional que actualmente utilizan dicha tecnología, se encuentran Amazon, BBVA, Google, Mastercard, Santander, Visa y Walmart, entre otras. Y los principales sectores en los que Blockchain hará grandes transformaciones son: automotriz, banca y servicios financieros, comercio, telecomunicaciones y sector salud. Por algo, Blockchain encabezó la lista de habilidades más demandadas en 2020 de acuerdo con LinkedIn.
La DTI de la Universidad Anáhuac ha apostado por incluir la tecnología de Blockchain y ofrecer a los alumnos certificados de esta forma. Respondiendo a la necesidad
de contar con un mecanismo accesible y seguro que emita certificados avalados en un primer paso para las áreas de Posgrado y Vida Anáhuac, para posteriormente incluirlo en todas las áreas.
¿Cómo funcionan estos certificados?
Son certificados académicos digitales. Su confiabilidad está en la tecnología blockchain que garantiza que cuando alguien presente uno de estos certificados, se pueda verificar con seguridad que es auténtico.
Cada miembro del sistema certificador tiene una copia de todos los blockchains y si uno de ellos quiere añadir un bloque, debe ser aprobado por toda la red. Por lo tanto, aunque un miembro certificador aceptara un intento de falsificación, sería inmediatamente rechazado por el resto de los miembros de la red certificadora.
Y cada modificación a un blockchain genera un bloque nuevo inmutable por lo que el historial de transacciones siempre estará disponible. Esto nos brinda confiabilidad en el blockchain para tener la información precisa sin alteraciones.
Blockchain, es aplicable a diversas áreas y sectores empresariales, que permite gestionar grandes cantidades de datos de forma confiable y eficiente. Y seguramente cada vez escucharemos más al respecto.
PARA SABER MÁS:
La Universidad Anáhuac Mayab inauguró recientemente el nuevo Laboratorio de Inteligencia, Innovación Educativa y Tecnológica, único en su tipo en el sureste de México con espacios dedicados a potenciar el aprendizaje de los alumnos a través de nuevas tecnologías y experiencias inmersivas.
