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El compromiso social de las universidades en tiempos del COVID-19



El compromiso social de las universidades en tiempos del COVID-19

El escenario actual nos inspira en muchos sentidos y el compromiso social de las universidades es de los más importantes.

El Dr. José Castilla Barajas, director de Compromiso Social, y el Dr. Bernardo Rangel Sada, vicerrector de Formación Integral, ambos de nuestra Universidad, comparten con la Comunidad Anáhuac su más reciente artículo en el que abordan la importancia del compromiso social de las universidades durante esta pandemia.

El compromiso social de las universidades en tiempos del COVID-19


El escenario actual nos inspira en muchos sentidos y el compromiso social es uno de los más importantes. La actual circunstancia de esta pandemia, al igual que las guerras y desastres naturales, es motivo de reflexión e introspección al cuestionarnos ¿qué nos pasa?, ¿por qué nos suceden estas cosas?


En las adversidades a lo largo de la historia se encuentra el momento perfecto para que los seres humanos descubran su mejor versión, entre ellos el gran sentido de solidaridad y resiliencia, y podemos mencionar sin duda muchos ejemplos de esto. Fue en épocas de guerra cuando se inventó el Internet: una herramienta poderosa que nos conecta. La guerra que primero enfrentó a muchos y provocó tanta pérdida y valiosas vidas, fue también ocasión de inventiva humana. De igual modo, la actual crisis sanitaria que nos aísla en nuestros hogares provocó una necesidad de inventiva para permanecer unidos y mirar fuera de nuestras cuatro paredes en busca de personas a las que podamos ayudar.


Han existido grandes figuras que, con determinación y dando un “Sí” en el momento que más se necesitaba, cambiaron su propia realidad y la de todo su entorno. San Roque y su lucha en tiempos de la peste, un santo para tiempos de pandemia; la heroica defensa de La Coruña por María Pita y el estudio de la reactividad y su nuevo elemento químico gestionado por Marie Curie. San Felipe Neri, proveniente de una familia acomodada, transformó Florencia acompañando, educando y transmitiendo la alegría que hacía falta ver.


Cuando las cosas se tornan difíciles, es el momento de darle la cara a la adversidad. Sin embargo, ¿cómo hacerlo en tiempos de cuarentena?, ¿cómo mantener la esencia del compromiso social universitario? ¿Cuál es el compromiso social de las universidades en tiempos del COVID-19?

La Universidad Anáhuac al servicio de la comunidad médica COVID-19


Nuestra misión es orientar a la Comunidad Universitaria Anáhuac a la participación en proyectos sociales, detonando y coordinando las acciones que así requieran, en la búsqueda de ofrecer plataformas de formación que fomenten la genuina conciencia social y el desarrollo de actitudes y habilidades de caridad, empatía, servicio y entrega, para contribuir a cambiar de manera favorable y positiva su entorno.


La pandemia actual, bajo nuestra perspectiva, ha permitido la fusión de dos realidades simultáneas; por un lado, los grupos vulnerables, enfermos, adultos mayores, personas con historia clínica desfavorable y enfermedades crónico-degenerativas. Y por el otro, cientos de miles de personas que se ven obligadas a quedarse en sus casas con un corazón solidario y dispuesto a ayudar. Este es el terreno sobre el cual un compromiso social universitario debe ser creativo y con innovación para salir a la luz.


En esta situación, el mundo digital, el Internet y las redes sociales se han convertido en el puente perfecto para unir ambas realidades.


Los ojos del alumno Anáhuac deben encontrar en la pandemia actual un trampolín hacia nuevas soluciones que marquen la diferencia: estar en constante búsqueda de campos de oportunidad para la difusión e implementación del compromiso social a nivel académico y mediante la acción social directa e indirecta.


Si algún adjetivo puede definir a la actual contingencia es “cambiante”, siendo la adaptación del voluntario o voluntaria a los diferentes escenarios, y esto es algo fundamental.


Consejos del voluntariado en tiempos de COVID-19:
•    Analiza tus fortalezas
•    Identifica a los principales públicos meta
•    Reinventa y busca nuevos caminos
•    Mide el riesgo de cada proyecto y considera la prevención
•    Une fuerzas con otros proyectos e iniciativas
•    Siempre manda un mensaje de esperanza y corresponsabilidad
•    La capacitación y la parte académica-formativa son esenciales en cualquier proyecto


El voluntariado para atender la salud mental, la tele-asistencia psicológica, las campañas de crowdfunding, entre otros, son opciones viables.


La situación restringe el movimiento de las personas. El no poder salir, el no recibir visitas, propicia la inestabilidad emocional de los grupos más vulnerables, como lo son las personas con alguna discapacidad y los adultos mayores.


Según datos de Consejo Nacional de Población (Conapo), para el 2030 en México el 29.3% (más de 25 millones de personas) serán adultos mayores de 60 años. Bajo este contexto, el voluntariado a distancia brinda apoyo para ambas partes, es decir, la ayuda la encuentra quien lo brinda y quien recibe el apoyo.


En The Last Virtual Volunteering Guidebook, publicada por Jayne Cravens y Susan J. Ellis en 2014, se argumenta que los voluntarios en línea o a distancia deben formar parte de la estrategia general de una organización, una empresa o una universidad.

Hoy en día esta necesidad es evidente. El perfil de la persona que decide sumarse al voluntariado online es muy amplio y esto favorece la situación, desde un experto en tecnología hasta una persona con poca práctica. El voluntariado a distancia favorece la tendencia académica del compromiso social, pues la capacitación es una parte fundamental de cada proyecto.


Consejos importantes del voluntariado a distancia:
•    Reclutamiento de voluntarios de manera más eficiente a través del Internet y las redes sociales
•    Gestionar el riesgo epidemiológico y proteger la confidencialidad en línea
•    Generar comunidades en línea de voluntarios en diferentes territorios
•    Ofrecer capacitación y orientación a través de herramientas digitales
•    El margen de los proyectos es muy amplio desde micro-voluntariado hasta proyectos a largo plazo, incluyendo desde investigación hasta contacto directo con usuarios


La Organización de las Naciones Unidas (ONU) en el año 2000 puso en marcha el Programa Internacional de Voluntariado en Línea, cuyas categorías de proyectos incluyen: arte y cultura, formación y preparación, traducción, sensibilización, entre otros. Hoy existen cientos de iniciativas en todo el mundo.


Además, el Voluntariado en Línea es una excelente puerta para aquellas personas interesadas en el compromiso social. Una oportunidad que hoy es más pertinente que nunca cuando millones de personas en todo el mundo permanecen en sus hogares para frenar la expansión del nuevo coronavirus.


El COVID-19 nos permite establecer la acción social como un elemento esencial en la formación de los alumnos de la Universidad Anáhuac México.


Todos podemos ser voluntarios en la distancia. Podemos donar dinero para que llegue alimento al que lo necesita o a quien perdió empleo, podemos donar nuestro tiempo, interesándonos por escuchar a las personas que conocemos y posiblemente se encuentran solas en este tiempo de confinamiento, y podemos fomentar políticas empáticas en nuestros centros de trabajo.


La nueva normalidad sin duda nos llevará a extender las prácticas exitosas que hoy descubrimos como oportunidades que no habíamos aprovechado, pero sobre todo nos recordará que tal vez vivíamos “tan solos” a pesar de estar rodeados de tantísimas personas. La nueva normalidad nos ha hecho detenernos para mirarnos a nosotros mismos y a nuestros seres queridos de una “manera distinta”.


Una vez que volvamos a vernos y a convivir en el parque, en los centros educativos, en las cafeterías y en los lugares que solíamos frecuentar antes de esta pandemia, seremos más humanos que antes; seremos más solidarios y seremos más conscientes de lo que hemos vivido. Hoy lo podemos contar, pero sobre todo vivimos para contar los unos con los otros, porque hemos transitado juntos esta etapa de adversidad con una lección de entre muchas: el aislamiento no nos impidió tender una mano de ayuda a la distancia.


Finalmente, recordemos algo fundamental: de nada sirve ser “candil de la calle” si no somos luz en la propia casa. Es mucho lo que podemos hacer para transformar nuestras casas en hogares, en lugares de cálida acogida, respeto y confianza, atención desinteresada, escucha y compañía atenta y empática.


Seguiremos escuchando, seguiremos apoyando, seguiremos reinventando. ¡Somos ASUA y vamos por más!

El compromiso social de las universidades

Referencias:

•    http://www.geriatria.salud.gob.mx/descargas/publicaciones/Vejez-pensiones-en-Mexico.pdf
•    https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/201801/An_lisis_prospectivo_de_la_poblaci_n_de_60_a_os_en_adelante.pdf
•    The Last Virtual Volunteering Guidebook: Fully Integrating Online Service into Volunteer Involvement (Inglés).
•    Guía para el Programa de Formación Integral Anáhuac para Escuelas y Facultades, Universidad Anáhuac México.
•    https://www.onlinevolunteering.org/es
•    https://blog.caixabank.es/blogcaixabank/2020/03/voluntariado-online-como-ayudar-y-dejarse-ayudar-en-cuarentena.html
•    Espiritualidad e identidad católica del Formador de vida universitaria, por Bernardo Rangel Sada.

 

 

 

Más información:
Vicerrectoría de Formación Integral
Dr. Bernardo Rangel Sada

Dirección de Compromiso Social
Dr. José Alberto Castilla Barajas
jose.castilla@anahuac.mx