“Aprendemos más de los fracasos que de los éxitos”, Mónica Badía Rodarte

Nuestra egresada y banquera privada, Mónica Badía, compartió con la Comunidad Universitaria parte de su experiencia laboral y personal.

Mónica Badía Rodarte (Ingeniería Química, gen. ‘17), banquera privada en J.P. Morgan, basada en Nueva York, nos invita a conocerla un poco mejor con la experiencia profesional que comparte con nuestra Comunidad Anáhuac.

Desde su puesto, trabaja principalmente con empresarios estadounidenses de instituciones financieras como Hedge Funds y Private Equities, con quienes establece relaciones a largo plazo, tanto con ellos como con sus familias. Al ser banquera privada, explicó, es importante establecer una relación de comunicación donde la confianza predomine.

En entrevista, reveló que uno de los mayores retos que ha vivido ha sido el reubicarse en Nueva York, puesto que se trata de “llegar a un nuevo país y empezar de cero. Aprender cómo funciona el tema patrimonial y fiscal, para poder asesorar a las personas de mejor manera”.

Nuestra egresada cree que el éxito son los pequeños logros que nos dan felicidad y que nos ayudan a crecer como personas en todos los aspectos. “Es no tener miedo a fracasar, sino aprender de los errores y motivarse a ser la mejor versión de ti mismo cada día”, agregó.

Sobre el fracaso, dijo que se trata de estar cada vez más cerca del éxito y parafraseó a Thomas Alva Edison, quien dijo que no se fracasa, sino que se encuentran 10,000 formas que no funcionan.

“Aprendemos más de los fracasos que de los éxitos. Se trata de demostrarse a uno mismo que somos mucho más capaces de lo que imaginamos, la clave está en no dejarnos vencer, sino levantarse y buscar la solución, aunque a veces implique hacer sacrificios”, aseveró.

También dejó claro que el liderazgo es inspirar a los demás a ser su mejor versión y contribuir a ello, ser resiliente y encontrar soluciones donde el resto ve dificultades, además de hacer todo con pasión.

Nuestra egresada también exhortó a alumnos a pensar a largo plazo y a no dejarse vencer por los retos que se presenten día a día, pues “estas batallas nos hacen más fuertes y nos ayudan a encontrar nuestra verdadera identidad. La vida es un maratón, no un sprint”, indicó.

Les pidió pensar en grande, ser ambiciosos y tener metas a corto, mediano y largo plazo que los mantengan motivados, además de nunca compararse con los demás, puesto que cada uno tiene sus fortalezas y debilidades, y añadió que “aprender a identificarlas es clave para saber cómo podemos ser nuestra mejor versión y en qué trabajar para seguir creciendo”.

El papel de los jóvenes en el ámbito en el que Mónica Badía se desarrolla es crucial, por ello, siempre busca ayudar a los demás y contribuir a nuestra sociedad en cualquier cosa que hagamos, sin importar lo pequeña que sea la acción. 

“Somos el futuro de este mundo, tenemos un papel fundamental en el desarrollo de nuestra sociedad y vivimos en un planeta que necesita jóvenes ambiciosos y líderes de acción positiva que quieran ser parte del cambio”, finalizó.

*Colaboración de la maestra Begoña Manero Martínez, coordinadora de Vinculación con Egresados.