Investigadores de la Anáhuac México y la UPCI obtienen patente de dispositivo fotoconductor

A través de una colaboración interinstitucional, se impulsa la innovación con el registro de una nueva tecnología fotoconductora orgánica.

Con orgullo compartimos que, gracias a un esfuerzo conjunto de alto nivel, la Facultad de Ingeniería de la Universidad Anáhuac México, en colaboración con la Universidad Politécnica de Cuautitlán Izcalli (UPCI), obtuvo la patente del "Dispositivo Fotoconductor Flexible de Películas Semiconductoras Orgánicas a base de Ftalocianina de Cloruro de Indio (III)" otorgada por el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI). Este logro reafirma el compromiso de ambas instituciones con la innovación tecnológica y la investigación de materiales avanzados.

Esta invención es resultado del trabajo de la Dra. María Elena Sánchez Vergara, el Dr. Leon Hamui Balas, ambos investigadores de nuestra Universidad Anáhuac México, y el Dr. Luis Alberto Cantera Cantera; presenta una avanzada arquitectura de heterounión plana que promete transformar las aplicaciones fotoconductoras orgánicas flexibles.

El dispositivo destaca por alcanzar una estabilidad comparable a la de los materiales inorgánicos —avance significativo en la electrónica flexible— lo que lo posiciona como un componente clave para la próxima generación de dispositivos tecnológicos.

Entre sus múltiples aplicaciones se encuentran:

• Sistemas de detección avanzados, como sensores biomédicos flexibles y de alta sensibilidad que se adhieren directamente a la piel para el monitoreo de la salud.

• Electrónica vestible (Wearables), para la fabricación de pantallas y dispositivos de iluminación (OLED) ultradelgados y enrollables.

• Energías renovables capaces de desarrollar paneles solares orgánicos flexibles (OPV) que puedan integrarse en textiles, indumentaria o estructuras curvas.

Con la creación de este dispositivo se busca facilitar la producción de circuitos más ligeros, económicos y eficientes, aumentando así las posibilidades de los mercados de tecnologías emergentes.

La concesión de la patente confirma la capacidad de ambas universidades para generar innovación de frontera, ya que el IMPI ha certificado que este desarrollo cumple rigurosamente con los criterios de novedad, actividad inventiva y aplicación industrial.